Movimiento en la arquitectura

Movimiento en la arquitectura

Arquitectura de concepto de viaje

Marianna Chrapana obtuvo su título de máster en arquitectura en 2016 en la A.U.Th. de Grecia. Ha trabajado como diseñadora industrial y arquitecta en prácticas en Tesalónica y como editora colaboradora de “Architeam” en los sitios web Archipaper / Architravel.

Virginia Giagkou obtuvo su título de máster en arquitectura en 2016 en la A.U.Th. de Grecia. Ha trabajado como arquitecta en prácticas en Tesalónica y como editora colaboradora de “Architeam” en los sitios web Archipaper / Architravel.

En los últimos años la arquitectura ha descuidado el movimiento del cuerpo y su relación con el espacio.Las expresiones arquitectónicas y corporales se han estandarizado.Aunque la arquitectura diseña para el cuerpo no tiene en cuenta su movimiento e interacción con el espacio.Teniendo en cuenta estas cuestiones, se creó la necesidad de experimentar de nuevo sobre la relación entre el espacio y el movimiento. En consecuencia, este proyecto se centra tanto en el análisis de los elementos constitutivos del movimiento del cuerpo como en la generación del espacio en función de ellos. Se seleccionaron cuatro movimientos como casos de estudio: el escalador, el equilibrista, el buceador y el aerialista. El proceso experimental fue común a los cuatro casos. Al principio, analizamos cada movimiento mediante cronofotografías, centrándonos en sus datos cualitativos. A continuación, mediante un programa de animación produjimos instantáneas tridimensionales de los movimientos. Por último, introduciendo diferentes elementos espaciales, estudiamos la configuración del espacio en función del movimiento.

La circulación en la arquitectura

La arquitectura moderna, o arquitectura modernista, fue un movimiento arquitectónico o un estilo arquitectónico basado en nuevas e innovadoras tecnologías de construcción, en particular el uso del vidrio, el acero y el hormigón armado; la idea de que la forma debe seguir a la función (funcionalismo); la adopción del minimalismo; y el rechazo del ornamento[1].

Surgió en la primera mitad del siglo XX y se convirtió en el estilo dominante después de la Segunda Guerra Mundial hasta la década de 1980, cuando fue sustituido gradualmente como estilo principal para los edificios institucionales y corporativos por la arquitectura postmoderna[2].

La arquitectura moderna surgió a finales del siglo XIX a partir de las revoluciones en la tecnología, la ingeniería y los materiales de construcción, y del deseo de romper con los estilos arquitectónicos históricos e inventar algo que fuera puramente funcional y nuevo.

La revolución de los materiales fue la primera, con el uso de hierro fundido, placas de vidrio y hormigón armado, para construir estructuras más fuertes, ligeras y altas. En 1848 se inventó el proceso de fundición de vidrio, que permitió la fabricación de ventanas muy grandes. El Palacio de Cristal de Joseph Paxton, en la Gran Exposición de 1851, fue uno de los primeros ejemplos de construcción en hierro y vidrio, seguido en 1864 por el primer muro cortina de vidrio y metal. Estos desarrollos condujeron al primer rascacielos con armazón de acero, el Home Insurance Building de Chicago, de diez pisos, construido en 1884 por William Le Baron Jenney[3] La construcción con armazón de hierro de la Torre Eiffel, entonces la estructura más alta del mundo, cautivó la imaginación de millones de visitantes a la Exposición Universal de París de 1889[4].

Viaje y movimiento en la arquitectura

Por sencilla que sea, la arquitectura debe contener siempre un elemento de sorpresa. Debe permitir el movimiento de quienes pasean por sus diferentes espacios (nspaces). La arquitectura no es algo que se observa únicamente desde una perspectiva inmóvil (el ojo del fotógrafo), sino que también se observa desde un movimiento fluido (cambio de punto de referencia).

(Nota: Si O se mueve en relación con un punto de referencia absoluto y un objeto o edificio está inmóvil en relación con esa referencia absoluta, el objeto o el edificio se ve como en movimiento desde el punto de referencia [O]).

La velocidad de movimiento de los observadores en el tiempo es siempre idéntica, aunque su percepción del tiempo pueda variar según la persona y el lugar. En cambio, la velocidad de movimiento de los observadores en los nespacios es diferente. Por tanto, la percepción de la arquitectura en movimiento en el nespacio variará de una persona a otra.

Esto significa que hoy en día, al crear un edificio, hay que tener en cuenta la percepción (multisensorial) de un observador que puede estar inmóvil o en movimiento en una o varias de las “n” dimensiones, ya sea dentro o fuera del edificio.

Ejemplos de movimiento en la arquitectura

El impacto de los estilos Art Deco y Art Moderne fue pronto eclipsado por el desarrollo del estilo internacional, que dejó una impresión duradera en el paisaje urbano especialmente. El estilo internacional, con su apariencia descarnada de formas rectangulares, salpicadas de bandas de ventanas, anunció una nueva visión “moderna” del estilo y la finalidad de la arquitectura. Inspiradas en el cubismo del arte moderno en Europa, las formas cuadradas de los edificios de estilo internacional encarnaban también una nueva teoría social de la arquitectura. Con nuevas y valientes formas que utilizaban las nuevas tecnologías de construcción de la época, el estilo internacional se presentaba como un nuevo tipo de arquitectura diseñado exclusivamente para satisfacer las necesidades de la gente común en la Era de la Máquina. En el periodo entre las dos guerras mundiales, los arquitectos europeos adoptaron este concepto y diseñaron no sólo edificios comerciales, sino también casas con esta nueva y audaz forma.

Los innovadores arquitectos estadounidenses, como Louis Sullivan y Frank Lloyd Wright, también habían avanzado hacia una nueva teoría de la arquitectura. Las bases para un cambio significativo se establecieron con el desarrollo de los estilos sullivanesco, comercial, bungalow y pradera a principios del siglo XX. La influencia europea cayó en un terreno muy fértil en Estados Unidos, ya que las ideas de los estilos Art Deco, Art Moderne e Internacional se fusionaron con las tendencias arquitectónicas estadounidenses en desarrollo. Aunque el legado arquitectónico de Frank Lloyd Wright incluye una gran variedad de estilos, una de sus obras más conocidas, Fallingwater, situada en el municipio de Stewart, en el condado de Fayette, encarna elementos del estilo internacional con su énfasis horizontal, sus formas geométricas, su aspecto orgánico y sus bandas de ventanas. La arquitectura del Movimiento Moderno fue audazmente diferente en concepto y diseño, poniendo a prueba continuamente los límites de la forma, los materiales y la función.