Aportaciones de aristoteles a la filosofia

Aportaciones de aristoteles a la filosofia

La contribución de Aristóteles a la educación

Aristóteles fue un filósofo griego que realizó importantes aportaciones al sistematizar la lógica deductiva y escribió sobre temas físicos. Su filosofía tuvo una influencia duradera en el desarrollo de todas las teorías filosóficas occidentales.

Aristóteles no era principalmente un matemático, pero hizo importantes contribuciones al sistematizar la lógica deductiva. Escribió sobre temas físicos: algunas partes de su Analytica posteriora muestran un dominio inusual del método matemático. Sin embargo, es principalmente importante en el desarrollo de todo el conocimiento, ya que, como escriben los autores de [2]

Aristóteles, más que ningún otro pensador, determinó la orientación y el contenido de la historia intelectual occidental. Fue el autor de un sistema filosófico y científico que a lo largo de los siglos se convirtió en el soporte y el vehículo del pensamiento escolástico medieval cristiano e islámico: hasta finales del siglo XVII, la cultura occidental fue aristotélica. E, incluso después de las revoluciones intelectuales de los siglos siguientes, los conceptos e ideas aristotélicos siguieron arraigados en el pensamiento occidental.

Filosofía de Aristóteles

Como tal, gran parte de su trabajo en física es especulativo, pero ofrece una gran cantidad de conocimientos. Contribuyó a la investigación real en varias áreas de la ciencia y tuvo una previsión increíble para un intelectual de la época de la antigüedad clásica.

Es significativo que Aristóteles defendiera una cierta creencia en el razonamiento inductivo que no se encontraba en su maestro más deductivo, Platón. Por tanto, el método filosófico de Aristóteles se asemeja más al método científico actual que el de su maestro. Según Aristóteles, estudiaba los fenómenos que eran causados por lo “particular”, que era entonces un reflejo de lo “universal”, o del conjunto de leyes físicas. Aristóteles también describió la “ciencia” como “… práctica, poética o teórica”.

Uno de los muchos campos a los que Aristóteles contribuyó fue el que llamó “filosofía natural”. Consideraba la “filosofía natural” como una ciencia “teórica”. Aristóteles dedicó la mayor parte de su vida a las ciencias naturales, aportando investigaciones originales a la física, la astronomía, la química, la zoología, etc. Aristóteles expresó una temprana creencia teleológica al decir que las cosas naturales tienden a ciertos objetivos o fines. La teleología es la creencia filosófica de que existen ciertas causas finales en la naturaleza. Según Istvan Bodnar, en The Stanford Encyclopedia of Philosophy, “la naturaleza, según Aristóteles, es un principio interno de cambio y de estar en reposo (Física 2.1, 192b20-23). Esto significa que cuando un ente se mueve o está en reposo de acuerdo con su naturaleza, la referencia a su naturaleza puede servir como explicación del evento”. Esencialmente, Aristóteles creía que la referencia a las cualidades innatas de un objeto (si está en reposo o en movimiento de forma natural) ayudaría a determinar la causa de un suceso. Por supuesto, ahora sabemos que los objetos se ponen en movimiento cuando actúan sobre ellos una fuerza neta y tienden a permanecer en movimiento hasta que otra fuerza neta actúa sobre ellos. Sin embargo, Aristóteles hizo un punto importante con esta idea: que las fuerzas que actúan sobre los objetos pueden ponerlos en movimiento o hacer que tiendan al reposo.

Resumen de la filosofía de Aristóteles

Poco se sabe de su vida. Aristóteles nació en la ciudad de Estagira, en el norte de Grecia. Su padre, Nicómaco, murió cuando Aristóteles era un niño, y fue educado por un tutor. A los diecisiete o dieciocho años ingresó en la Academia de Platón en Atenas y permaneció allí hasta la edad de treinta y siete años (c. 347 a.C.)[5] Poco después de la muerte de Platón, Aristóteles abandonó Atenas y, a petición de Filipo II de Macedonia, fue tutor de Alejandro Magno a partir del año 343 a.C.[6] Estableció una biblioteca en el Liceo que le sirvió para producir muchos de sus cientos de libros en rollos de papiro. Aunque Aristóteles escribió muchos tratados y diálogos elegantes para su publicación, sólo se ha conservado un tercio de su producción original, ninguno de ellos destinado a la publicación[7].

Los puntos de vista de Aristóteles influyeron profundamente en la erudición medieval. La influencia de la ciencia física se extendió desde la Antigüedad tardía y la Alta Edad Media hasta el Renacimiento, y no fue sustituida sistemáticamente hasta la Ilustración y el desarrollo de teorías como la mecánica clásica. Algunas de las observaciones zoológicas de Aristóteles en su biología, como la del brazo hectocotílico (reproductor) del pulpo, no se creyeron hasta el siglo XIX. También influyó en las filosofías judeo-islámicas (800-1400) durante la Edad Media, así como en la teología cristiana, especialmente en el neoplatonismo de la Iglesia primitiva y en la tradición escolástica de la Iglesia católica. Aristóteles fue venerado entre los eruditos musulmanes medievales como “El Primer Maestro”, y entre los cristianos medievales como Tomás de Aquino como simplemente “El Filósofo”, mientras que el poeta Dante lo llamó “el maestro de los que saben”. Sus obras contienen el primer estudio formal conocido de la lógica, y fueron estudiadas por eruditos medievales como Pedro Abelardo y Juan Buridán.

La contribución de Aristóteles a la ciencia

Aunque otros filósofos occidentales también se han ocupado de la flora y la fauna, Aristóteles fue el primero en estudiar la biología de forma sistemática. De ahí que se le pueda considerar el primer biólogo de la tradición occidental. Además, el método de Aristóteles se asemeja al estilo de la ciencia utilizada por los biólogos modernos, con la recogida sistemática de datos, el descubrimiento de patrones y la inferencia de posibles explicaciones a partir de ellos. En sus obras, Aristóteles nombra unas 500 especies de aves, mamíferos y peces; distingue decenas de insectos y otros invertebrados; y describe la anatomía interna de más de un centenar de animales, de los que diseccionó unos 35. Colocó a los animales en grupos según las características que compartían y fue capaz de identificar 11 grupos de búsqueda, a los que llamó géneros. Además, fue el primero en clasificar a los animales en función de su hábitat: animales terrestres, acuáticos y aéreos.

Basándose en los trabajos de filósofos anteriores, Aristóteles escribió uno de los primeros textos completos de psicología. Titulado De Anima (Sobre el alma), el enfoque del texto no es espiritual sino biopsicológico, el estudio de la psicología dentro de un marco biológico. El término alma en el texto puede traducirse mejor como fuerza vital. Según Aristóteles, los animales y las plantas también tienen alma como los humanos. Las plantas tienen un alma vegetativa, que comprende las facultades de crecimiento, nutrición y reproducción. Además, los animales tienen un alma sensitiva, que comprende las facultades de percepción y locomoción. Además de las dos anteriores, los seres humanos poseen un alma racional, que comprende las facultades de la razón y el pensamiento. Aristóteles fue uno de los primeros en examinar los impulsos que impulsaban la vida, afirmando que el impulso de reproducirse (“libido”) era el impulso primordial de todos los seres vivos y que éste derivaba del alma vegetativa o vegetal. Además de la libido, las acciones humanas estaban determinadas por el “Id” y el “Ego”. El trabajo de Aristóteles en psicología fue indiscutible durante muchos años y determinó la historia del tema. Además, muchas de sus propuestas siguen influyendo en los psicólogos modernos.